Bitácora del
capitán…
Fecha estelar 20310
Desde hace un
tiempo es innegable el aumento de la violencia en Europa y que una buena parte
de ella viene de inmigrantes.
Desgraciadamente,
la inmigración musulmana ha convertido el acuchillamiento y las violaciones (especialmente
a menores)en un símbolo que los identifica, debido a la cada vez más frecuente
práctica por realizar estos ataques (lamentablemente para los musulmanes
pacíficos que se ven atrapados en la misma etiqueta, por culpa de esos desadaptados).
Junto al acuchillamiento,
y en mucho mayor medida, también se han incrementado las violaciones,
especialmente a menores, y buena parte de ellas vuelven a ser culpa de
inmigrantes, y entre ellos, buena parte de musulmanes.
Estos actos
violentos, independientemente de que lo realicen nativos o naturales europeos o
extranjeros, inmigrantes, legales o ilegales, deben ser detenidos con decisión.
Y la única manera de que esto pase es con castigos tan ejemplares que los agresores
realmente teman atreverse a cometer el crimen. Al contrario de lo que pasa
ahora, con leyes muy laxas y políticas demasiadas alcahuetas, que más bien los envalentonan.
Para ello, el
castigo debe ser un paquete o fórmula que incluya: confinamiento, deuda,
vergüenza, dolor físico y reeducación. Si es el caso, expulsión, no sólo de
España, sino de toda la Unión Europea.
Así:
-En todas las
partes del proceso que se pueda (detención, confinamiento preventivo, etc…)
debe haber un mínimo de funcionarios mujeres (no por igualdad de género, sino
porque para muchos de estos violentos es humillante ser sometidos por una
mujer).
-Mientras dure
el juicio, el reo realizará trabajos comunitarios (adecuadamente custodiado y sin
contacto con civiles).
-En el caso de
violadores condenados serán convertidos públicamente en eunucos. En el caso de
los acuchilladores u otro tipo de agresores violentos intencionados, recibirán
públicamente 13 latigazos en la espalda con un látigo embardunado en sangre de
cerdo; más, con un látigo con 3 puntas de acero, 3 latigazos por cada víctima
leve o que haya quedado fuera de peligro en menos de una semana; 6 latigazos
por cada víctima que haya tenido su vida en peligro de perderla por más de una
semana o que le hayan dejado secuelas físicas; y 10 latigazos por cada víctima mortal
inmediata o por consecuencia de las heridas recibidas. No hay distinción ni se
podrá recibir menos latigazos ni por edad ni por sexo.
-Tanto el acto
violento en sí, como cualquier otro delito cometido conjuntamente, además de
los años de cárcel que se le imputarán, también conllevará una gran multa
económica en beneficio tanto para cada víctima como para el Estado. La idea es
que este tipo de delitos violentos generen una MONSTRUOSA deuda económica, de
manera que si el agresor posee bienes o ingresos en Europa (no sólo en España),
le sean confiscados y no posea ni perciba nada. La consideración de no
confiscarlo todo, por haber otras personas dependientes de esos ingresos, será
llevada al extremo de su mínima expresión.
-El tiempo que
dure el proceso no podrá ser tomado como parte del cumplimiento de la condena (y en caso de que sea inevitable, como en ese tiempo no se ha cumplido con la
parte del trabajo forzoso no podrá equipararse a tiempo de condenada a más de
un tercio del tiempo del proceso).
-Si el reo es
extranjero no habrá extradición. Si la llega a haber, deberá por lo menos cumplir
la mitad del tiempo sentenciado en confinamiento, haber pasado por el castigo
de vergüenza/dolor (castración o flagelación) y no se salvará de la deuda y sus
confiscaciones. En caso de que la extradición se consiga antes de la sentencia,
se aplicará la máxima pena posible de la multa, prohibición de regresar a
Europa y se entrega a las autoridades extranjeras, en una exhibición pública y
denigrante.
-El reo
extranjero, tras cumplir su sentencia, es expulsado de Europa (no sólo de
España). El reo nacionalizado, pierde la nacionalidad y es expulsado al cumplir
su sentencia.
-Durante
todo el proceso se mantendrá un profundo estudio y seguimiento psicológico al prisionero,
para efectos de su evaluación personal para su programa de terapia y mejoramiento
y de análisis de posibilidad de reincidir, y para estudios médicos en general,
Pero, en ningún caso, una evaluación positiva puede reducir su condena. Se
continuará el seguimiento tras cumplir la pena, si permanece en el país.
-El reo tiene
libertad para realizar sus oraciones diarias (sin excederse en tiempo) y algún
que otro acto religioso, pero en vista de que se considera que, en el caso de
las personas violentas de religión musulmana, su cultura es un incitador a la
violencia, no recibirá ni tendrá acceso a ninguna documentación ni guía
espiritual musulmán. Estarán disponibles otras religiones para las que quieran “rescatarlo”.
-Recibirá
tratamiento psicológico y de reeducación para aprender y aspirar a ser una persona
no violenta, moral, ética y de bien. Se incluirá la oportunidad de profundizar
o cambiar de religión, siempre y cuando ésta no sea la musulmana.
-Si tras el
trabajo forzado y buena conducta aún tiene fuerzas, podrá recibir algún
beneficio, como estudiar, pero nunca acortará la pena, ni el trabajo
forzado.
-Si hay
reincidencia se debería optar por la pena capital (ahorcado públicamente, de
ser posible). En caso de que esta opción no se admita, cadena perpetua con
mutilación de su mano diestra (si cercenar la mano no es admitido se cambia a dejársela,
pero haciéndole polvo todos sus huesos).
-Se deberán
modificar todas las leyes y reglamentos que sean necesarios para hacer esto
realidad, si de forma seria se pretende detener la escalada exponencial de
extrema violencia y violaciones que se está generalizando. La violencia maliciosamente
intencionada no se detiene ni respeta consideración humanitaria. Sólo el
terror a sus consecuencias es capaz de intimidarla.
Agradweciendo la revisión de estilo por @Cristi_latin
Última actualización el 30-08-2024
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